Salimos a las calles, una vez más, llenas de tristeza, de rabia, de una espantosa normalidad que un día sí y otro también, nos arrebata vidas en nuestra ciudad.
Foto de apertura: @Rulo94
No fuimos tantas como podría esperarse, alrededor de medio centenar de personas que habitualmente nos trasladamos en bicicleta, a pie o en transporte público y que somos quienes más engrosamos los datos de lesiones y muertes por accidentes de tránsito.
Comenzamos tomando un carril de la Glorieta de Insurgentes, justo frente a la Secretaría de Seguridad Ciudadana, para exigir acciones concretas que reduzcan la violencia vial.
La sensación de indefensión que vivimos a diario se potencializó con las muertes de la Dra. Merit y la señora Ángela, ambas, mayores de 50 años, ambas embestidas por trailers mientras se trasladaban en bicicleta, ambas en Azcapotzalco.
Aún se sentía, también, el coraje de las agresiones, golpes, robos y detenciones arbitrarias de cinco personas que reclamaron a un operador de Metrobús su manejo agresivo contra una familia que regresaba del Paseo Nocturno en bicicleta organizado por el gobierno de la Ciudad.
Ese paseo en el que patrullas con sirenas y torretas encendidas, se lanzaron contra ciclistas, niñas y niños incluidas, para «liberar la vía».
Sin olvidar el vuelco que dieron nuestros corazones al amanecer del pasado 2 de noviembre con la noticia de la artera agresión contra Juan Pablo Ramos, mientras caminaba en compañía de su esposa.
Pasos por la paz. Manual de una protesta exitosa.
En nuestras protestas nunca cerramos el paso a vehículos de emergencia ni al transporte público, lo que puso en aprietos al personal de concertación social que buscaba que «liberáramos» la Glorieta.
«La Glorieta está abierta… Para las personas», dije mientras me veía con estupefacción e incredulidad.
Al final, tuvimos que cerrar la circulación dirección sur para que, en menos de 20 minutos, llegara el nuevo Subsecretario de Control de Tránsito, José Alfredo Rosales Alcocer, y nos recibiera.
Después de dos horas de negociaciones, logramos tres hitos puntuales para dar los primeros Pasos por la paz.
1. La barredora del Muévete en bici ya no se realizará con patrullas sino con una línea de policías de tránsito en bicicleta.
2. Compromiso para que todos los oficiales de tránsito conozcan y sepan la importancia de los artículos 2 y 30 del Reglamento de Tránsito.
3. Atención a denuncias sobre vehículos que pongan en riesgo la seguridad e integridad de las personas al violar el reglamento de tránsito.
Todo esto se acompañará de reuniones de seguimiento semanales.
Sí, son acciones pequeñas pero que nos permitirán avanzar hacia una cultura de paz y respeto.
Es un triunfo importante de todas las personas, organizaciones y grupos que se involucraron en esta protesta y es un grito para decirles a Merit, a Ángela, a Juan Pablo y a todas las víctimas de la violencia vial y de la inseguridad pública que no están solas, que no las vamos a soltar nunca, hasta que ninguna persona muera por salir a caminar.